Amigos Lectores: he tenido este día el honor de estrechar la mano, darle mi muestra de apoyo, y caminar unos segundos junto al candidato presidencial por el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) y futuro presidente de El Salvador a partir del 1 de junio, Mauricio Funes en la proclamación del candidato a alcalde del municipio de Concepción de Ataco, Alfredo Olla, padre y abuelo de grandes amigos mios a los cuales les tengo una alta estima.

El motivo de esta reseña no es pavonearme que conozco de muy de cerca y pude notar el lado cálido y humano de Funes, ni tampoco que estuve muy de cerca de otros altos funcionarios del Frente, para muchos de ustedes será algo común y cotidiano estos hechos que yo les comento que me emocionaron esta tarde de domingo. Sin embargo la razón por la que escribo estas lineas me impresiona y emocionan aun más. El arrastre y el poder de convocatoria que el Lic. Funes tiene sobre la población es inmenso y lo pude constatar de primera mano.

Las personas se están generando expectativas. El pueblo quiere ver a Funes en la presidencia de la República, la gente quiere ver un cambio, quiere cambios inmediatos y de impacto en su vida diaria y cotidiana. Saben que a los arenarcos se les acabó el tiempo. El cambio vendrá de la mano de Funes. La gente sabe eso y por eso se concentra, se convoca ella misma, no espera nada a cambio, no hay inclemencias del tiempo que las detenga. Quieren ver y escuchar a su candidato y futuro presidente de primera mano. Le brindan su apoyo masivo, Mauricio lo sabe y lo agradece. Es cálido con la gente, se nota gozozo compartiendo con su gente salvadoreña, esa gente que le dará el triunfo para que cambie este país que 19 años de gobiernos arenazis lo han dejado prácticamente en ruinas. La "Caravana de la Esperanza" que él lleva por todo el país se está convirtiendo, y creciendo exponencialmente, en una Caravana de la Victoria, por el poder de convocatoria que tiene sobre los millares de personas que se concentran cada vez que se anuncia su llegada a algún rincón de este país.

Pero hay otro factor importante además de la convocatoria que genera. Y es la razón de este título: el valor agregado que Funes ha llegado a dar al partido que representa. Y es que habemos muchos que votamos por el partido, que creemos vehementemente que el cambio está con la izquierda del Frente. Con la llegada de un rostro nuevo como Mauricio más adeptos a él y a su popularidad votarán por el partido de izquierda. Gente para nada vinculada con la ideología ni con los colores del partido ahora ven como la opción política por la cual votar para las venideras elecciones del 2009. Y esto sin mencionar el arrastre que tendrá para votos para alcaldes y diputados. En conclusión, ganancia completa, tanto política como para el pueblo, que veremos el verdadero cambio venir a nuestros hogares.

No he dicho nada nuevo, simplemente que ahora lo vi con mis propios ojos y lo vivieron mis propias carnes, por eso decidí compartirlo.

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